Una semana después de su contundente regreso con “Manchild”, Sabrina Carpenter sorprendió nuevamente al anunciar su séptimo álbum, Man’s Best Friend, que Island Records lanzará el 29 de agosto de 2025
¿Qué ha generado tanto revuelo?
Apenas mostró lo que sería la portada —ella de rodillas, en un vestido negro, mientras un hombre sostiene su cabello como si fuera correa— la red estalló. Usuarios la califican de “degradante”, “sumisa” y “catered to the male gaze”
Sin embargo, una voz más académica aporta contexto. La Dra. Emma Phillips, de la University of Canberra, sugiere que el impacto visual puede ser una forma consciente de retomar imágenes de sumisión con un enfoque satírico o irónico, activando un debate sobre poder y sexualidad femenina.
¿Mensaje artístico o estrategia de marketing?
La portada, acompañada de otra imagen con un collar perruno que alude directamente al título del álbum, refuerza una estética de juego de poder y posesión. Además, el single “Manchild” —una crítica mordaz a la inmadurez masculina con tintes country‑disco— ha escalado rápidamente en Spotify tras su estreno el 5 de junio.
Con esto en mente, algunos creen que la artista y su equipo están montando una estrategia que mezcla shock visual, retórica feminista y marketing viral. El controversy vale atención, y Carpenter, como lo ha mostrado en entrevistas, no duda en continuar con esa narrativa controvertida .
En medios como India Today se acusa la portada de reforzar el male gaze y la objetivización femenina. Entretanto, The Daily Telegraph y New York Post interpretan la jugada como un acto de liberación artística de una ex estrella infantil que no busca ser modelo para niños.
Además, them.us señala que esta estética de “pup‑play” ya se ha filtrado en pop a través de artistas como Nicole Kidman y Amy Adams, planteando el debate sobre apropiación queer y exploración sexual.
Al día de hoy no está confirmada oficialmente la imagen final de la portada, lo que abre la puerta a especulaciones de que sea incluso un señuelo para medir la respuesta pública antes de definir la versión definitiva.
Sea provocación legítima o movimiento de relaciones públicas, las reacciones—positivas y negativas—han logrado mantener a Sabrina Carpenter en el centro del spotlight justo antes del lanzamiento.
Lo que está claro es que Carpenter sigue en modo disruptivo, lanzando mensajes sobre poder, rol femenino y expectativas sociales a través de su música, estética visual y contenido.
La portada de Man’s Best Friend sirve como acelerador de conversación en torno a cómo las artistas femeninas negocian con imágenes de sumisión, objetivación y poder. ¿Está Carpenter devolviendo esas imágenes con ironía para criticar el sistema? ¿O permite que su figura sea usada como adorno visual?
Lo cierto es que abrir esta discusión no puede considerarse casualidad: es una herramienta potente para magnificar la presencia de su marca y generar expectativa alrededor del álbum —no sólo por la música, sino por su discurso visual. Un lanzamiento musical que retumbará tanto en Spotify como en redes.