Como muestra de su inagotable capacidad de reinvención, el little black dress o vestido negro negro sigue siendo un imprescindible sin importar la temporada, y esta Primavera-Verano 2025 no será la excepción.
Además, se ha convertido en un lienzo para las propuestas más atrevidas, con cortes gráficos, escotes audaces y detalles cuidados que reflejan la creatividad de diseñadores muy inspirados en preservar su legado de moda.
El vestido negro con falda corta y midi ganó su estatus icónico cuando la diseñadora Coco Chanel, a finales de los años veinte del siglo pasado, lo transformó en una pieza esencial del vestuario diario de las mujeres más elegantes.
Su diseño original era un vestido negro sencillo, que llegaba hasta la rodilla, con un elegante cuello y mangas largas. Años después, Christian Dior declaró: “El vestidito negro debe ser parte esencial del guardarropa de toda mujer”. Y es que este clásico no solo ha inspirado a numerosos diseñadores de moda, sino que también ha dejado su marca en el cine, siendo inmortalizado por heroínas como Audrey Hepburn en “Desayuno con diamantes”, vestida de Givenchy; Mireille Darc, luciendo un diseño de Guy Laroche en “El gran rubio con un zapato negro” de 1972; o la actriz francesa Catherine Deneuve, en casi todas sus películas.